CIUDADES

Cusco, antigua capital del Imperio Inca, es un destino mágico donde la historia vive en cada calle empedrada. Rodeado de montañas andinas, este lugar fusiona herencia incaica y arquitectura colonial española. Desde aquí parten las rutas hacia Machu Picchu, una de las maravillas del mundo, y hacia el Valle Sagrado, lleno de paisajes y cultura viva. Cusco no solo se visita, se siente.

Arequipa, conocida como La Ciudad Blanca por sus construcciones de sillar volcánico, es una joya del sur de Perú. Rodeada por imponentes volcanes como el Misti, combina belleza natural, arquitectura colonial y una vibrante cultura gastronómica. Su centro histórico, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, y el impresionante Cañón del Colca, hogar del majestuoso cóndor andino, hacen de Arequipa un destino imperdible.

​Iquitos, la ciudad más grande de la Amazonía peruana, solo accesible por avión o río, es la puerta de entrada a la selva más diversa y vibrante del planeta. Navega por el majestuoso Amazonas, observa delfines rosados, explora reservas naturales como Pacaya Samiria y conoce comunidades indígenas con tradiciones ancestrales. Iquitos es naturaleza salvaje, cultura viva y una aventura que despierta todos los sentidos.

Huaraz es el destino ideal para los amantes del trekking, la montaña y los paisajes de altura. Ubicada en la Cordillera Blanca, ofrece rutas espectaculares como la Laguna 69, la Laguna Parón o el nevado Pastoruri. También puedes explorar el Parque Nacional Huascarán y conocer la cultura ancestral en sitios como Chavín de Huántar. Huaraz es aventura pura rodeada de glaciares y cielo azul.

Chiclayo es sinónimo de historia milenaria y cultura viva. Aquí se descubrió al Señor de Sipán, uno de los hallazgos arqueológicos más importantes de América. Visita el impresionante Museo Tumbas Reales y los sitios ceremoniales de Túcume y Batán Grande. Además, disfruta de su exquisita gastronomía norteña y su ambiente cálido y hospitalario.

Lima, la capital del Perú, es una ciudad vibrante donde la historia colonial se mezcla con la modernidad y la cocina de clase mundial. Desde los balcones del Centro Histórico hasta los acantilados de Miraflores con vista al Pacífico, cada rincón ofrece una experiencia única. Es el punto de partida perfecto para descubrir el Perú y deleitarse con una de las gastronomías más reconocidas del planeta.

Puno, a orillas del lago navegable más alto del mundo, es cuna de tradiciones ancestrales y paisajes que inspiran. Navega por el imponente Lago Titicaca y conoce las islas flotantes de los Uros, hechas de totora, o las comunidades de Taquile y Amantaní, donde el tiempo parece detenerse. Entre danzas, leyendas y vistas inolvidables, Puno es un encuentro con el alma andina.

Más allá de sus playas, Piura es cuna de tradiciones vivas, música alegre y una gastronomía que conquista. Prueba el seco de chabelo, el majado de yuca o un ceviche al estilo norteño con zarandaja. Visita pueblos como Catacaos, famoso por su artesanía en filigrana de plata y sombreros de paja, y descubre la hospitalidad que caracteriza al norte del Perú.

Conocida como la Ciudad de la Eterna Primavera, Trujillo combina historia precolombina, arquitectura colonial y sabor costeño. Visita Chan Chan, la ciudad de adobe más grande de América, y las Huacas del Sol y de la Luna, testigos del esplendor mochica. Disfruta de sus coloridas danzas típicas como la marinera y de su cercanía a playas como Huanchaco, cuna del surf y los caballitos de totora.

Cajamarca es una joya andina donde la historia y la naturaleza se encuentran. Escenario del encuentro entre el Imperio Inca y los conquistadores españoles, su legado vive en monumentos coloniales y sitios arqueológicos como Cumbemayo y Ventanillas de Otuzco. Relájate en los Baños del Inca, sumérgete en su cultura viva y disfruta de verdes paisajes, arquitectura tradicional y deliciosa gastronomía serrana.